He visto
tu lunar
lengua brazo
te tengo en mi oreja palpitando oscilando directo a la muerte
tu pupila infinita amenaza la luz negra de sueños viejos dolor miedo
mi cabeza en lo oscuro en el azar en tu lengua de nuevo
me amarra me quema me rompe destila tritura carne sangre vida
mi dedo en tu espalda en el remolino que se forma en tus pulmones gritando en tu aliento en mi cara y te veo y por un segundo soy nadie soy de esta cama de esta noche vienes con tu voz multiplicada en ecos malditos en tu cuerpo en el mío con tu trote de fiera tu pelo tu oreja no quiero dejarte no puedo dejarte apareces en el espejo en los zapatos en el fondo de una taza vacía te odio te odio te odio te odio te odio te odio te odio te odio caminando viento cigarro fuego tu eres de fuego te odio tengo que verte de nuevo.

Danza de tallos dolor ciego silencio dedos pelo cuerpo
tu cuerpo caos explotar mutar en tus pupilas el alma a la eternidad.

Marea que arrastra peces muertos cadáveres felices que flotan en tu vientre de amapola tu espalda lunar el caos capturado en tu pupila silente ansiosa en lo oscuro tengo tu cuerpo deshaciéndose en mis manos eres vapor que penetra mi cerebro me persigue tu aliento tu pupila.

Hoy no puedo más con mis ojos

Desconcierto del sueño al ser olvidado por el soñador.
Triste la pelusa que se va de la madeja la lana y al volver, la encuentra hecha chalina, con una forma extraña,
en otro cuello.

Obra de teatro
dentro de la misma obra de teatro
dentro de la misma obra de teatro
actuando dos actrices

Asombro del piloto ante el grupo de gaviotas que reposa en las alas de su avión.